Midsommar es el segundo largometraje del director Ari Aster que fue estrenado este verano. Este joven director salto a la fama con su primera película 'Hereditary' (2018), una cinta de terror que perdurara en el tiempo. ¿Logrará esta el mismo impacto?
Sinopsis
Un grupo de jóvenes estadounidenses deciden aceptar la invitación de uno de sus amigos para irse a Suecia a una de sus pequeñas comunidades. Una vez allí el grupo tendrá el privilegio de presenciar una festividad que se realiza cada 90 años, el Midsommar. Una festividad relacionada con el solsticio de verano que no tardará en tomar un carácter inquietante y perturbador.
Que la fiesta comience
Midsommar tiene un comienzo relajante y cotidiano, que se tergiversa en el momento en el que este grupo de jóvenes emprende su viaje a Suecia.
Es muy curioso como Ari Aster nos presenta el momento en el que las cosas van a comenzar a cambiar, si nos fijamos bien este lo hace con el inicio de un plano cenital que gira 180º colocando todo el plano como si estuviera dado la vuelta. Con este gesto pretende premonizar lo que se viene a continuación y avisar al espectador que desde ese preciso momento las cosas van a darse literalmente la vuelta.
Además, este movimiento de cámara y a continuación el siguiente de unos 360º que nos vuelve a colocar en la posición original, crean al espectador una sensación de vértigo y de mareo metiéndonos en la escena de lleno.
Pero esta no es la única vez que el director nos mete en el plano. Este realiza en numerosas ocasiones a lo largo de cinta numerosos planos generales que nos colocan en la escena haciéndonos participe de ella. Pero, además, estos grandes planos generales nos inquietan ya que no solo pretenden meternos en la escena, también es una forma de decirnos, "no vas a poder controlar todo lo que pasa".
Un guión impecable que es manchado por la sangre
Ari Aster ha vuelto a escribir un guion original e impredecible que tarda un poco en tomar forma. Este se toma su tiempo para mostrarnos el interior del filme, lo que a algunas personas con poca capacidad de espera puede llegar aburrir.
En mi opinión veo perfecto el ritmo que este toma, creo que es necesario esa introducción al ambiente en el que se va a desarrollar la historia. Además, la lentitud del guión se sabe aplacar muy bien con los elementos de suspense y de intriga que se nos va creando al espectador. Aparte, al no darnos todo vendido desde el comienzo, es como que a medida que avanza la historia vamos descubriendo más cosas nuevas, alimentando así nuestra sed de seguir viendo el filme y querer conocer más y más sobre esta comuna.
Respecto a la banda sonora que nos acompaña durante todo el filme cabe decir que es muy curiosa porque no tiene nada que ver con las películas de terror puro. Esta no intenta manipular la visión del espectador, no intenta aumentar la sensación de terror, y esto es porque no lo necesita.
La banda sonora es un perfecto acompañante en esta historia. No es necesario que esta afiance nuestras sensaciones de suspense porque la atmósfera de la película no lo puede hacer mejor.
La realidad retratada en Midsommar
Si reflexionamos sobre la película nos daremos cuenta como muchos aspectos de la realidad quedan retratado en la película. Para comenzar comentare los colores usados.
Ari Aster nos cubre el filme con unos colores claros, es especial blancos y verdes, unos colores que transmiten paz y pureza. Con esa fotografía y ese vestuario nadie imaginaría lo que esconde el filme.
Esa capa exterior hace referencia a la apariencia, pero en cuanto nos metemos a ver la película esta toma un carácter bastante inquietante, oscuro y perverso que no tiene nada que ver con los colores que se nos presentan. Creo que este es un tema muy fácilmente transportable a la realidad teniendo en cuenta que vivimos en un mundo que se rige por aparentar.
Otro tema que tiene que ver con la realidad se puede observar en Dani, el personaje principal. Esta chica interpretada por la actriz Florence Pugh está marcada desde el inicio de la película por un terrible suceso, la muerte de su familia.
Esta es chica bastante inestable, insegura y muy sensible que no tiene nada que ver con cómo acabará la cinta. Creo que Dani es un reflejo de la humanidad, pero tomando unos matices que quiero explicar.
Dani se ve expuesta al llegar a esa comuna sueca a una serie de terribles sucesos que dañan su sensibilidad por completo. Al final suceso tras suceso se acaba acostumbrando hasta llegar al final del filme, donde parece que ya nada la afecta.
Es aquí donde vemos el retrato de la humanidad, todos comenzamos siendo frágiles e inseguros, pero al final nos "deshumanizamos". Con esto quiero decir que al comienzo a uno le afectaban algunas las cruentas imágenes transmitidas continuamente por televisión, pero de alguna forma ya nos hemos hecho a ellas, y no nos afectan tanto hablando en términos generales.
Conclusión
En definitiva, Midsommar, nos muestra un terror que no necesita casas embrujadas, una fotografía oscura, ni fantasmas para que nos revolvamos en el asiento.
Sobre si es mejor que la primera cinta del director, no voy a entrar en debates, creo que es cosa de gustos y yo ya tengo el mío. Pero una cosa es segura, y esta es que este joven director de tan solo 33 años está trayendo ideas frescas al cine de terror actual, y creo que merece la pena estar atentos a sus siguientes proyectos.
Nota: 8/10
Javier Atienza
